He nacido mala, mala, mala, como la hierbabuena. Al ladito de la ortiga, contoneando mis caderas.
Cuando vienen malos tiempos y el dolor se va extendiendo. Aquí estaré yo, aquí estaré yo.
Suave como terciopelo, juro este canto sincero. Me has confundido, con el veneno.
No pasa nada, entiendo, moreno. Luego dices tú te, creo, que al menos no hace falta que lo diga..
Equivocas estos ojos, con el espejo.
No pasa na, yo sigo aquí. Entera, silvestre y viva, yerbabuena. Presume de haberme querido y hoy me pisas, tan a la ligera.
He nacido mala, mala, mala, como la hierbabuena. Lo que el hombre no quería, me antoyaba tierra nueva, parecía
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