En “Siempre BB”, la puertorriqueña De La Rose planta bandera en un terreno de reguetón sin cortapisas.
En la letra, se propone desde el inicio una entrega sin barreras, un juego de atracción que no espera permiso, solo acción.
La canción invita a ese momento en que los cuerpos se reconocen; aquí el afecto no es suave, es urgente; no pide, exige.
En este sencillo, la producción acompaña con ritmo y atmósfera de noche: percusión marcada, voz cercana, metáforas visuales que transmiten tanto la acción como la liberación.
De La Rose ha trazado un camino una de vulnerabilidad, carisma femenino y reguetón directo al cuerpo. Su voz y su actitud siguen destacando en una escena que exige tanto identidad como ritmo.
Para quien la escucha, es una noche, un susurro, un vuelco corporal y emocional. Y para De La Rose, una declaración: aquí estoy, y no tengo miedo de que me vean querer y ser querible.
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